El segundo disco en solitario de Justin Timberlake continúa con la línea de sonidos del anterior. Cuenta de nuevo con la colaboración de Timbaland y con el éxito que tuvo con su primer disco, Justified.
Musicalmente no hay un cambio muy significativo si lo comparamos con el primer disco. Continúa con unas bases muy trabajadas llenas de sonidos que amenizan la escucha, ya que no hay dos canciones que se parezcan y que al final acaban haciendote mover la cabeza al ritmo de esas bases, con esos soniditos y distorsionadores que tanto le han aportado al pop actual. Pese al uso de estas bases tan R&B no deja de lado el uso de violines y guitarras como ocurre al final de Lovestoned, uno de los temas más significativos del disco por su cambio de ritmo y donde Justin nos regala uno de los trazos más bonitos de su voz. Con esto tampoco nos tenemos que olvidar de los sonidos exóticos y atrayentes que utiliza en canciones como What goes around... come around.
Es importante hacer una mencion a las personas que colaboran con Justin en muchas canciones. Esos raperos que prestan su voz y sus rimas para dar un cambio de ritmo a las canciones y que completan la especial voz de Justin. El cuál, como ocurre en el primer disco, prefiere no abusar de los falsetes y desarrollar más otras facetas de su voz.
La lírica de este disco es muy diferente del anterior, ya que no solo es el amor el tema principal de los temas, sino que también se encuentran el desamor, la ira, la venganza y el resentimiento. Además de esto también se puede ver un cambio notable en el lenguaje utilizado, ya que este disco tiene un aviso en la portada el cual pone sobreaviso del lenguaje subido de tono que se puede apreciar en algunos temas como Sexyback. Esto es un punto a favor de Justin ya que ha dejado atrás al niño que saltó a la fama con N´SYNC y que mantuvo un idilio con Britney Spears. Es un Justin más maduro y más profesional.
Un punto muy importante que hace que este disco haya estado en el punto de mira durante los meses posteriores a su lanzamiento, son los singles que han usado para promocionar el disco; Sexyback es el mejor ejemplo, fuerte, salvaje y muy sexy muestra a un Justin que es todo un hombre y nos demuestra porque Britney estuvo tan colgada de sus huesos. El resto de singles siguieron en la misma línea.
Personalmente este disco no esta mal, pero es más de lo mismo, es muy parecido al anterior y aunque la calidad es mucho mejor, las canciones son más largas, están más trabajadas y se ve que ha tenido una buena producción, es un Justified II. Esperaba más riesgo, pero se ve que se está guardando para el tercero, el cual, aún no tiene visos de salir. Aún así, no esta mal, y si te gusta Justin, este disco te encantará.
Nota: 7
Mejor cancion: Sexyback
domingo, 9 de agosto de 2009
# Crítica musical
Crítica musical: Justin Timberlake, FutureSex/LoveSounds
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